Ubicación:
Condesa, Ciudad de México
Área total:
1,000 m2
Colaboradores:
Guillermo Suárez Almazán
Guillermo Almazán Cueto
Dirk Thurmer Franssen
Beatriz Almazán Cueto
Fotografías:
Jaime Navarro
Datos:
Por asigntaura
4 Niveles
Proyecto Ejecutivo y Construcción
Ubicada en el corazón de la colonia Condesa, Campeche 239 es el resultado de una intervención arquitectónica que equilibra la conservación del patrimonio con la evolución de las necesidades contemporáneas. La estructura original, una vecindad construida en 1906 y catalogada por su valor histórico, se transforma en un conjunto residencial donde la materialidad y la espacialidad dialogan con el pasado y el presente.
La intervención respeta la esencia del inmueble al conservar sus fachadas frontal y lateral, preservando su impronta en el tejido urbano. Al interior, los muros fueron reconfigurados para responder a los requerimientos actuales, permitiendo una distribución más eficiente sin perder la esencia de la edificación original. La inserción de nuevas circulaciones y espacios habitables se realizó con una precisión que privilegia la luz y la ventilación natural.
El pasillo lateral, una de las características más distintivas del proyecto, se convirtió en un umbral de luz y vegetación. La integración de iluminación rasante y jardines lineales suaviza la transición entre el exterior y el interior, acentuando la relación entre arquitectura y naturaleza. Este recorrido enfatiza la permeabilidad visual y la sensación de apertura en un contexto de alta densidad urbana.
La estructura del edificio se reforzó estratégicamente para permitir la adición de dos niveles superiores, en cumplimiento con la normativa de remetimientos. Estas nuevas plantas, ejecutadas con una estructura de acero, flotan sobre la preexistencia sin competir con ella, definiendo una superposición de tiempos arquitectónicos. La elección de acero, concreto y tabique original como materiales principales permite una lectura clara de la intervención: lo preexistente se distingue de lo añadido sin perder cohesión.
La incorporación de parasoles y elementos estructurales en acero genera un juego de sombras dinámico a lo largo del día, enfatizando la textura de los materiales y reforzando la relación con la luz natural. La iluminación, tanto en exteriores como en interiores, fue concebida para resaltar la plasticidad de los espacios, enfatizando los contrastes entre lo histórico y lo contemporáneo.
Campeche 239 es un ejercicio de equilibrio entre la preservación y la transformación. Una reinterpretación del espacio que, sin nostalgia, respeta la memoria construida y la proyecta hacia el futuro.